martes, 19 de junio de 2007

Noticiero Hechos 18 de junio

En el noticiero de Hechos Puebla se da la nota sobre los despidos en Ciencias de la Comunicación, se lee un fragmento del artículo escrito por el recién despedido profesor Jorge Calles; Pienso, Luego Conspiro. También se hace pública la carta de padres de familia -publicada en el blog del Dr. Esquivel- y que en próximos días será enviada al patronato de la universidad.



Un link a las notas del día, click aquí.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi mamá me pregunta si es posible que a través de la carta también se haga una denuncia ante la ley a Palou porque esta gastando el dinero que con mucho esfuerzo los padres pagan

¿el dinero de colegiatura debe ser usado para la invertir en la universidad? Alguien sabe

mi mamá cree que es para ese fin

que opinan los demás padres

Anónimo dijo...

me parece que es muy difícil comprobarlo

Anónimo dijo...

me parece que el uso de los ingresos de la universidad no se pueden transparentar. pero no es necesario. el mismo palou dijo que el superavit de no sé cuántos millones se está usando para liquidar a nuestros profesores. en mi opinión (y creo que la de muchos) hay otros rubros mucho más urgentes para lo que se puede utilizar: biblioteca, laboratorios, sueldos de profesores y administrativos (secretarias, no directivos), repavimentación del circuito, instalaciones deportivas, etc, etc, etc. ver mejoras en estos y otros aspectos sería transparentar el uso de nuestras colegiaturas, no creen?

Anónimo dijo...

Creo que es exagerado decir que el departamento de Comunicaciones o el de Economía estén destruídos y que no puedan ofrecer cursos el próximo semestre. Comunicaciones quedó con 3 profesores, que son más profesores de tiempo completo que los que tiene el Tec (2), la UPAEP (3) o la Ibero. Con profesores de tiempo parcial (muchos de ellos con experiencia en medios), tanto la Ibero como la UDLA siguen siendo muy buenas opciones para Comunicación. En Economía, pues quedan 5 profesores, que es mucho mas que lo que tiene el Tec o la UPAEP y la Ibero. Me acuerdo (soy exaudla) que en 1993 habían 18 profesores en el Departamento de Economía (contando al Dr. Cardenas, que además era rector), entre ellos Rogelio Arellano, Ricardo Barba, Jorge Cabrera, Mario Carrillo, Gonzalo Castañeda, Alfredo Font, Guillermo González, Fausto Hernández, Eduardo Lastra, Rutilio Martínez, Jorge mejía, Sergio Ortiz, Mónica Osorio, Jose Santillana, Jose Manuel Treviño, Herberto Villegas y Ryszard Zukowski. Algo pasó en 1995-1996 que se fueron la mayoría y solo quedaron 3 profesores (Enrique Cardenas, Gonzalo Castañeda y Ryzard Zukowski), y Dirk Valckx (de Matemáticas) como jefe interino. Luego de ese lamentable episodio, afortunadamente el Departamento se reconstruyo en 2-3 años, para volver a posicionarse como uno de los mejores del país. No se si sea algo cíclico esto de las catástrofes y renacimientos. Espero por el bien de la UDLA que así sea y ojala que en medio de esta crisis, renazca como ha ocurrido otras veces. Mi humilde contribución.

Anónimo dijo...

entonces la conclusión es que Palou dejará a todos los departamento sólo con 2 o tre profesores eso si que es muy triste

Anónimo dijo...

Es una conclusión exagerada y erronea. La UDLA no es una universidad de 10 profesores de tiempo completo (ni lo será). Es una lástima la salida de gente, pero estoy seguro que serán reemplazados al paso del tiempo (como ocurrió en Economía en los noventas). Espero que sean gente tan buena como la que en su momento entró reemplazando a los despedidos en otros tiempos (pre-Nora, pre-Palou).

Anónimo dijo...

entonces porque literatura sigue con 2 ó 3 profes se supone que ya era para que estuviera reconstruido (no sé ve para cuando) como en los noventas economía

cuantos años lleva que palou lo destruyo, 2 años...

alguien sabe?

Anónimo dijo...

No coincido del todo con el exalumno de economía de los años 90. Por un lado, estoy de acuerdo en que dichos departamentos podrán funcionar el próximo semestre, sin embargo, se verá afectada significativamente la calidad de los cursos. De ningún modo menosprecio a los profesores de tiempo parcial, pero un académico dedicado de tiempo completo a la docencia y la investigación puede ofrecer una mayor calidad en los cursos.

Por otro lado, al menos en el departamento de economía (me imagino que en comunicación sucederá algo similar)tanto el programa de maestría como el de doctorado en economía no podrán abrirse, ya que por estar dentro del padrón excelencia del conacyt, debe cubrir requisitos que en este momento ya no se llenan debido al despido de los 5 doctores.

Además, comparas el departamento de economía de la udla con el del tec, la upaep o la Ibero, lo cual me extraña, pues siendo egresado de la licenciatura en economía, debes saber que el nivel de nuestro departamento estaba por encima del de las instituciones que mencionas (sobre todo en la investigación, ya que los enfoques de esos departamentos son totalmente distintos)

Yo tambien soy exaudla de economía, y creo que el decir que el cambio inesperado de profesores ya ha sucedido otras veces no significa ni que sea normal, ni que sea correcto ( ademas, muchos de los profesores que mencionas son de tiempo parcial, no eran de tiempo completo)

Tampoco coincido contigo en la reconstrucción de 2-3 años que mencionas. Es increible creer que los 10 años dedicados a consolidar el departamento de economía de la que teniamos en la UDLA, pueda ser destruido en un abrir y cerrar de ojos por la pésima toma de decisiones, y obedeciendo a intereses no académicos.

En conclusión, creo que los departamentos afectados por los despidos han sufrido un ENORME retroceso en la calidad a ofrecer para futuros semestres, y sobre la "destrucción" de los departamentos, puede que sea cuestión de semántica, no se si te parecería correcto decir que estan "al borde de la muerte" o que se yo. Pienso que por ningún motivo debe minimizarse la problemática actual.

Anónimo dijo...

Efectivamente, es una situación que no se puede ni se debe minimizar. Lo que está de fondo es que el modelo de universidad que conocimos en los años anteriores está por cambiar, y parece claro que el cambio no será de ningún modo para bien.